Vigo Respira ArteVigo respira arte, y uno de sus perfumes más característicos es el del modernismo.
“… llamativas esculturas modernas, como los caballos del artista local Juan José Oliveira” (opinión sobre el arte vigués de crismadrid, comunidad dooyoo) Para quienes deseen impregnarse de este delicioso aroma, les recomendamos la zona del puerto, donde podrán encontrar dos de sus principales representantes: el edificio Mülder (en la imagen), del arquitecto Manuel Gómez Román, cuya cúpula revestida por losas cobrizas nos invita a soñar con mundos de fantasía; y El Monumento a Elduayen, claro ejemplo del detallismo moderno de Agustín Querol y Subirats. |
Y, si por el contrario, buscan una fragancia más vanguardista, Vigo tiene exactamente lo que necesitan: arte abstracto. De norte a sur, la ciudad les ofrece un sinfín de posibilidades, como son: El Sireno, situado al final de la calle Príncipe, siempre vigilante y deseoso de retornar al mar, el Monumento a la Mujer en pleno paseo marítimo, o incluso su reciente compañero Monumento a Julio Verne, que goza de una vista privilegiada sentado cómodamente sobre los tentáculos de un pulpo. Igualmente, les recomendamos otros como el Monumento a Rosalía de Castro, calle Rosalía de Castro, en honor a la poetisa gallega, el Monumento a Martin Códax, monte del Castro, avezado trovador de estas costas, el Monumento de los Caballos, plaza de España, recuerdo de aquellos bravos animales que campaban a sus anchas por la ciudad, o el Monumento al Bicentenario de la Ciudad, obra de Silveiro Rivas, que se encuentra en la parte baja del Castro, muy cerca del Ayuntamiento, y donde podrán ver el símbolo de la ciudad (el olivo y el castillo) reconvertidos en acero y marcando la dirección de cada barrio.
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Finalmente y, para aquellos que se vean atrapados por el arte contemporáneo de 1970, es de obligada visita la zona de la Plaza de Compostela, donde se encuentran algunas de las obras más distinguidas del escultor Camilo Nogueira. Les sugerimos que visiten esta última zona en torno a las diez de la noche, ya que las esculturas son iluminadas por focos haciendo juegos de sombras, colores y tonalidad. |
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